NI TAN PRO VIDA NI TAN PRO MUERTE

provida

Parto estas líneas celebrando el derecho de miles de chilenos de expresarse en contra del proyecto de ley del aborto terapéutico. Para muchas personas éste es un tema de primerísimo orden, donde se juega literalmente la vida y las convicciones más profundas de cada ser humano.

Asimismo, es bueno para Chile que la gente se movilice por sus propias causas, que levante banderas, que se organice y decida dejar su cómodo sillón de una tarde de domingo para salir a la calle y defender lo que consideran justo.

Es por eso que destaco las cartas al director, los debates que comienzan a aparecer en programas de televisión, las declaraciones de distintos movimientos y fundaciones contrarias al aborto, la opinión de médicos y especialistas, los testimonios de quienes han vivido estas situaciones en carne propia, los comentarios en las redes sociales y las marchas que, tarde o temprano, volverán a aparecer por nuestras avenidas.

Sin embargo, hay algo con lo que debiéramos tener cuidado y que se asoma con regularidad en esta discusión. Y es esa cierta arrogancia y autoridad moral que se instala desde quienes dicen “defender la vida” en contra de aquellos que buscarían “avalar un crimen” al apoyar el proyecto de ley.

¿Podemos catalogar de “pro vida” a quienes se oponen a la ley de aborto terapéutico? No. Al menos desde mi mirada la vida es mucho más que su concepción y alumbramiento. Hay todo un camino por delante donde esa misma vida debería ser defendida con la misma pasión, convicción y valentía. Y tengo la impresión de que son pocos, muy pocos, quiénes se dedican los 365 días del año a hacerlo y menos los que luchan todos los días por prevenir los abortos que ocurren a diario en Chile. Para el resto, colgarnos la chapa de “pro vida” sólo por mostrarnos contrarios al proyecto de ley, me parece presumido.

¿Y podemos catalogar de “pro muerte” a quienes apoyan el proyecto de ley? No. Es que no creo que quienes viven en carne propia un embarazo producto de una violación, clínicamente inviable o que pone en riesgo la vida de la madre y dudan,  sean “pro muerte”, sino más bien seres humanos que están en medio de una feroz encrucijada moral.

Imagino (aunque cuesta imaginárselo de verdad) el calvario que viven los protagonistas de situaciones como ésta. Cuando toda madre embarazada espera una fiesta, a muchas les toca un funeral. Lo de ellas es sencillamente una situación extrema, excepcional y horrorosa.

Y es por ellas que me quedo pensando. Y es por ellas que creo que esta discusión debe ser abordada con extremo cuidado y respeto. Imagino que esos padres ya tienen bastante con lo suyo, para además tener que bancarse la mirada acusadora de miles y miles de personas.

La vida no es blanca o negra, matices hay por montón. Y cuando esta discusión recién comienza, deberíamos evitar caer en la fácil práctica de encasillarnos en grupos “pro vida” y “pro muerte” o creernos mejores por levantar una bandera de lucha que, simplemente, no estamos ni cerca de conocer en toda su magnitud. Hay una gran tragedia en el medio que hay que saber pesar y empatizar.

Yo estoy en contra del aborto. Al final, cada uno fijará su posición, pero la invitación es a discutir en respeto y en voz baja, porque estamos en medio de un funeral.


Por Matías Carrasco.

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3 comentarios en “NI TAN PRO VIDA NI TAN PRO MUERTE

  1. Ximena Baraona dijo:

    Lei tu comentario y lo que dices es muy cierto, pero creo que es importante aclararse a uno mismo si cree realmente que el «feto» es un ser humano. De ahí vendría lo demás. Sin duda, las situaciones que incitan a pensar en un aborto debieran ser terribles, conozco varios casos, sin embargo, lo que debieramos plantearnos los seres humanos es el amor y cariño que le debemos a esa mujer, la comprensión, el apoyo económico, nunca juzgarla y en ese contexto cuidar y protejer la vida.
    Además, tengo entendido que en Chile no hay ninguna mujer condenada por aborto. Al haber posibilidad de hacerlo sin pena, se da un mensaje de que es una opción y podría tratarse de algo, no alguien.

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  2. ka. dijo:

    Soy mujer y estoy a favor del aborto…a estas alturas de mi vida, yo no podría hacerlo, pero lucho para que si un día tengo hijas, tengan ellas la libertad mental y social de hacerlo o no. Para nadie, para ninguna mujer ha de ser fácil tomar una decisión como abortar, dudo que se haga así como «por deporte», especialmente porque el proyecto es en casos específicos ( considerando obviamente que se abrirá una ventana para el resto..si, es una realidad), pero no es una ventana o puerta abierta para el aborto. y, finalmente..no se está obligando a nadie a abortar…»si Ud no quiere abortar…no aborte» dicen por ahi….y tienen razón… y lo digo/opino/escribo con respeto;traer un hijo al mundo no es cualquier cosa….concuerdo con la definición de «vida» de Matías, para mi gusto la columna es un poco mmmm….como que escribe para no quedar mal con nadie ( en esta ocasión)…como que termino de leer y me queda ese gustito es la boca al terminar…en fin…temazo. pero creo que si uno va a traer un hijo al mundo debiese ser querido, esperado, respetado, amado…todo….
    mi opinión. saludos!

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  3. Estimado una consulta aunque no vaya al caso favor trate de contestar
    1) ¿ Usted cree que es importante buscar vida fuera de este planeta, y usted cree que realmente la hay aun cuando la vida no sea en el concepto que la conocemos ?

    2) ¿ Usted cree que en un huevo hay vida animal ?

    3) Si un animal viola a otro de su especie usted castigaría al animal violador ?

    4) ¿ Haría abortar al animal violado ?

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